Sin palabras. Así nos hemos quedado tras ver el último estilismo con el que ha aparecidoKylie Jenner. La menor del clan Kardashian no ha querido perderse el desfile de Schiaparelli celebrado durante la Semana de la Moda de Paris. Una colección brillante que toma como principal protagonista la anatomía de la mujer en unas piezas destinadas a ser el foco de atención en cualquier lugar. Kylie Jenner, conocedora de esto, no ha dudado en alzarse con una de las propuestas más admiradas del evento y, para ello, se ha enfundado en un atrevido vestido firmado por la enseña con el que ha alardeado de marcadas curvas.
En cuanto la empresaria de 25 años salió de su hotel, todas las miradas se dirigieron hacia ella. Jenner lució un vestido largo de terciopelo en un color azul vibrante con el que perfectamente podría tratarse de una estrella de Hollywood posando frente a los focos en la alfombra roja.
Tan solo unos meses después de dar a luz a su segundo hijo, Kylie presumía de su icónica figura curvilínea gracias al diseño ceñido de la pieza y a su impactante y pronunciado escote en forma de corazón convirtiéndose así en un icono de sensualidad y glamour.
El desfile de Schiaparelli celebrado en White & Case LLP en Place Vendome recogió a algunas de las celebrities internacionales más alabadas. Chiarra Ferragni, Ashley Graham, Kat Graham… Ninguna de ellas consiguió ensombrecer con sus impecables propuestas a la multimillonaria.
La joven acaparó la atención de todos los presentes, y su estilismo no era para menos. Con un impactante vestido de corte sirena al más puro estilo diosa de Hollywood, Kylie alardeaba de la silueta en forma de reloj de arena que tanto la define.
El escote era el principal centro de atención de su estilismo, zona que se encargó de potenciar aún más añadiéndole un original choker en negro del que colgaba una estructura en forma de corazón.
Aunque su look beauty también se trata de una verdadera obra de arte destacando, principalmente, su espectacular moño alto trenzado y su sensual maquillaje con eyeliner marcado y labial rojo intenso. En pocas palabras, toda un icono de estilo.