A la hora de comprar una alfombra se nos plantean infinidad de cuestiones: las medidas más idóneas, qué colores o estampados sintonizan con el resto de la decoración o cuál es el material que deberíamos elegir. Por eso te dejamos 5 puntos a considerar al momento de elegir la alfombra de tu sala.
Tamaño
Elige una alfombra de acuerdo al tamaño de tu espacio. Una alfombra demasiado pequeña parecerá un tapete de baño si no cubre el espacio suficiente y hará lucir la habitación más pequeña de lo que realmente es. Lo ideal es que sea lo suficientemente grande para que entre debajo de tus sillones, unos 30 cm aproximadamente.
Color y diseño
Las alfombras pueden balancear tu sala si eliges correctamente el color y el diseño. Por ejemplo, una alfombra de colores claros y patrones sencillos puede equilibrar una sala muy oscura; o una alfombra estilo vintage o estampados peculiares puede añadirle carácter a tu espacio. Ten en cuenta los demás elementos decorativos de tu sala para que la alfombra no quite o ponga de más.
Textura
Sí, la textura es una de las grandes cualidades de las alfombras porque le dan personalidad al espacio. No es lo mismo una alfombra de pelo rasurado a una de pelo largo; la sensación y vista son totalmente diferentes. Por ejemplo, con una alfombra beige tejida puedes conseguir un estilo boho, mientras que una de pelo largo satinado le dará un look elegante y moderno a tu sala.
Material
Existen muchos materiales para fabricar alfombras, desde el poliéster hasta la lana. Cada uno tiene sus ventajas, sin embargo, debes de pensar en dónde la vas a colocar y cuál es el clima de tu hogar. En lugares calurosos no se recomiendan alfombras de tejido grueso o pelo largo, en cambio, las alfombras delgadas en poliéster o algodón resultan mucho más amigables. Mientras que en las ciudades con climas templados se recomiendan alfombras de lana y pelo largo para ayudar a aumentar la temperatura del espacio.
Mantenimiento
Claro, imagina que ya tienes la alfombra de revista, pero mantenerla limpia y en buen estado puede ser un gran reto. Lo que te recomendamos es aspirar tu alfombra cada 2-3 días, esto hará que el polvo y la mugre no se acumulen demasiado y de vez en cuando una limpieza profunda. Para esto necesitas saber de qué material es la alfombra de tu sala, de esto dependerá el tipo de limpieza que debes usar. Actualmente existen muchas empresas que se dedican específicamente a la limpieza de estos productos, sin dañar el material, color e incluso textura.